lunes, 25 de octubre de 2010

¿Qué personaje de Tim Burton eres?


lo que botó este test de mi es:

Eres Benjamín Barker, el Barbero de la calle Fleet...
Tienes un sentido de la justicia muy marcado y las cosas que no están dentro de ese baremo, te hacen rebelarte. Tú eres como el Barbero de la calle Fleet, Benjamín Barker. Serías capaz de cualquier cosa con tal de que no existieran las injusticias.

http://entretenimiento.es.msn.com/test/noticia.aspx?cp-documentid=150991087

Mis primeros libros


Allí estaba otra vez frente a los varios libro ordenados en el piso, había pasado varias veces por ese lugar y varias veces también me había detenido para leer los títulos, no había alguno que llamara mi atención o llenara mi curiosidad hasta que después de caminar por tantos días encontré en una oferta de libros un titulo escrito en un fondo negro rodeado por fuego y una imagen de una niña sosteniendo una vela “DEL AMOR Y OTROS DEMONIOS” mi primera impresión fué que el libro era un monologo de mitos o frases con moraleja pero al coger el libro y leer el resumen de la novela supe que no se trataba de ningún monologo “la lápida salto en pedazos al primer golpe de la piocha, y una cabella viva de un color de cobre intenso se derramó fuera de la cripta… extendida en el suelo, la cabella esplendida media veintidós metros con once centímetros” con la curiosidad de saber cual era la historia de esa niña compré la novela, quise leerla de inmediato pero en la calle hacia frío y no había un lugar adecuado.

En el colegio había leído dos novelas cortas no fue por cumplir algún trabajo sino que mi padre las encontró en un cajón guardado y me las dio, las leí sin ahínco y las considere como entretenido, en las vacaciones las volví a leer pero no cubrieron mis expectativas, Pero aquella tarde en mi habitación tome la novela y me introduje en la historia, fue la primera ves que puse atención a cada línea y seguí paso a paso el drama de Sierva Maria, la historia estaba enlazada con diversos sucesos extraños y únicos pero cada uno sacada de la realidad. Fueron unos días largos, con los trabajos, los cambios de hora y las entregas, pero pude terminarlo en un corto tiempo. Quedé maravillado por el desenlace, por la asombrosa narración, por las palabras que decían todo, por el criollismo que hacia más entretenido la lectura. Poco después cojí otro libro del mismo autor “OJOS DE PERRO AZUL”, una colección de cuentos, de su primera publicación, las narraciones no me decepcionaron. Gracias a esos cuentos me aminé a leer su obra mas destacada, mas leída y mas comentada a nivel mundial “CIEN AÑOS DE SOLEDAD” (novela que lo consagro como un o de los grandes escritores de nuestros tiempos)

Me quedé asombrado al ver el voluminosos libro y desalentado al ver las diminutas letras, temí no poder concluir el libro pero a las primeras líneas me quedé atrapado en la formidable historia, no quise soltarlo, no quise hacer pausa, temí perderme en el hilo de la historia y a duras penas la dejaba para seguir mi vida cotidiana pero al concluir con los quehaceres y los trabajos volví a la lectura retrocediendo dos hojas o tres hojas para reanudar el hilo de la narración, la fabulosa historia de la familia Buen Día, la dramática soledad de su hijo Aureliano, el inesperado final de José Arcadio el repetitivo tambalear de nombres en la descendencia, las 5 generaciones … Es una novela única e incomparable, merecedor indudable del premio Nóbel de literatura (1982) obra en la que hace lujo de su relación entre lo trágico y lo cómico de lo lírico y lo simbólico y lo trivial y lo sobrenatural.
Desde entonces suelo leer infatigablemente, convirtiendo así en una paradoja viviente (chiste)

lunes, 11 de octubre de 2010

-recuerdos-

...fragmentos...
Ya van pasando casi dos horas mas y en la calle aun siento a las personas caminar dejando pasos que se repiten en mi mente como un juego de sonidos ya nada molestos por que ya estoy acostumbrado, se que dentro de dos horas mas no se escuchara nada y caminare en los sueños buscando uno en donde encuentre alojo. No recuerdo bien desde cuando abandoné el abrigo de mi habitación para salir a la terraza y deje de soñar. Todas las noches son iguales; las personas caminan hasta las 10, las calles ya están vacías a la una y a las dos ya no se escucha ningún paso. Todas las personas están dormidas y en el silencio los recuerdos son más claros.
Después de tanto tiempo la recuerdo, siempre bella, no sé cómo pude olvidarla y no sé por qué esta noche la recuerdo …

sin titulo

Nunca olvidare aquellas alas membranosas, aquellos rostros oscuros, sin ojos, ocultos bajo unos trozos de trapos deshechos por el tiempo. Nunca olvidaré aquella noche silenciosa cuando unos ruidos extraños me levantaron de la cama, una serie de pasos, unos pies descalzos que cuyas uñas rasgaban el piso como piedras a un vidrio.
Ya hacía varias horas que no me dejaban dormir, quizás sea el gato roñoso que siempre cae en la misma trampa, cada noche, pero aquel gato ya aviase perdido con el tiempo, pero en un acto de misericordia decidí salir a liberarlo. Salí de mi habitación a la terraza y en un colapso de frio y calor la noche me despertó por completo. La luna, como unas luces de neón, iluminaba todo el extenso patio de concreto. Había un gran desorden, la bolsa de basura estaba abierta y junto a el un bulto negro que se movía “maldito gato” me acerqué sin sospechar nada y cuando toque el objeto; unas alas membranosas se abrieron lentamente, una cabeza sin rostro volteo a mirarme. Estaba de cuclillas, tenía unas manos que terminaban en unos dedos con garras, no alcanzaba el metro de altura, pero sus alas se extendían casi al ras de mis hombros.
Sostenía en una de sus manos un trozo de hueso que carcomía con verdadero placer. Me quedé quieto, viendo sus alas, oscuras y dañadas, arqueadas por el viento. Quise tocarlas, pero antes de que pueda sentir su piel dio un pequeño salto apartándose de mí, lanzo un chillido, una mescla de gato y ave. Caí espantado. De las oscuras sombras de la pared salieron otras dos criaturas las grandes, me miraron e hicieron un ademan de orgullo, saltaron a la baranda y se lanzaron al vacio, las tres criaturas volaron con dirección a la luna. Se perdieron en un punto oscuro en el horizonte.

sin titulo

El cielo fue tomando aquel tono gris de recuerdos. Odio aquellos momentos donde llego a encontrarme, después de haber hecho todo para olvidarme, allí estaba yo, frente a mí, frente a la fila de recuerdos manchada con un polvo somnoliento. Son un montón de muebles que uno deja en la azotea expuesta al sol y al frio, deshaciéndose poco a poco hasta que solo queda cenizas. Realmente odio recuperar aquella fila de libros donde oculte algún momento de nostalgia, pero la curiosidad siempre fue más que cualquier otra voluntad. No quiero encontrar nada, no busco nada, pero me llaman, no quieren que les deje sepultados en el cementerio del tiempo, pide casi a gritos que los lea. Pienso un momento. Sé que si los regreso a la vida destrozaran todo lo que hasta ahora he logrado, aunque no sea mucho, no quiero, realmente, no quiero encontrarme de nuevo.
Una catarata de lágrimas brota en la primera hojeada una ausencia de tiempo en la siguiente y en el resto un vacio de momentos que siempre oculte para no encontrarlos nunca. Odio encontrar un “nada” en estos muebles, odio subir a la azotea y encontrar aquella sombra que profana mis recuerdos. En un tiempo pasado me vi amenazado por mis propios ojos, emanaban un fuego intenso, capaz de consumir mi vida, capaz de imitar el aullido de los perros que recorren las calles en la noche. Aquella mañana lejos del tiempo y el infinito, me vi reflejado en un sujeto que se sentó a mi lado, en un principio no me reconocí por los lentes que traía, mucho menos por el perfil, pero cuando me miró, una ventana hacia el vacio se abrió en sus ojos; un saludo silencioso y una sequedad de espacio abrió el hilo de la conversación.
...continuá...

Golpe, Golpe, Golpe

...pudo haber encendido la radio y la computadora, y continuar con las cosas como todos los días, pero se recostó en la cama y dejo volar los papeles llenos de poesía y fraces sueltas. Pasó largos segundos con la mirada puesta en un punto indeterminado del techo, se levanto y escribió:
La sangre se marchita al tocar el suelo
la veo y carece de valor absoluto
la veo fluir lento como lava ardiente
espeso como sabia de un árbol oscuro
Mientras escribia ocultaba su mano que llevaba una gran cicatriz
Escribió también el final de tantas historias incompletas, lúcido, tomo el cigarro y lo apagó en una hoja vieja, camino hacia la ventana, levanto las cortina y miró tras de ella. Discretamente el cielo estaba compuesto por unas cuantas estrellas, mientras en el lago una luz flotaba a la deriva, de la mesa tomo un bocadillo, lo saboreo, tenia un sabor a un amargo olvido de esos que se nutren en el tiempo. Hizo una ultima movida a la partida de ajedrez, y leyó el ultimo capitulo de su libro favorito. Ya era tarde el reloj de la catedral abia finalizado el dia con una campanada. No hay sueño, aun hay fuerzas no naturales que le impiden dormir, y espera sentado a los pies de la cama, espera como quien espera, los que duermen, la culminación de los sueños. Cansado ya de todo toma el frasco con las capsulas, las toma una por una y las observa detalladamente en silencio, casi todas están vacías, toma una que tiene un contenido verdoso, lo observa sin ningún sentimiento, toma una botella con agua y se la bebe, y espera ….

Balbuceos

En mi cabeza solo hay un pensamiento, la muerte. Revolotea como una mariposa libre a su albedrio. Me pregunto si de la misma manera un pirómano piensa en el fuego o un ludópata en el juego.

Se hablan solo para consolarse “partió a un lugar mejor”,” paso a una mejor vida”. Si algo aprendí de la vida es que no hay nada después de la muerte. Pero por qué estar obsesionado con algo tan evidente¿?, pues es lo mágico de las cosas, dejarlos libres así toman un lugar en la tierra, la muerte, la vida, la soledad, la tristeza , la alegría.

Parado frente al vacio sintiendo como el viento te balancea, como el tiempo va creando una red uniforme, desde el principio hasta los últimos minutos, tejiendo una misma figura. Quien puede interpretar estos sueños

Lo sé uno ya no puede soportar más el dolor que en cuerpo imprime lo recuerdos; garras, dientes, lesiones grave, lesiones leves, todo, todo tiene su lugar en el alma. Espero no morir desangrado